En septiembre de 2025, un grupo de estudiantes de secundaria de Platero participará en una estancia de 10 días en Winchester (Inglaterra), acompañados por dos profesoras y alojados con familias inglesas en régimen de pensión completa. Disfrutarán de actividades académicas, culturales y de ocio, así como de cuatro excursiones a Londres, Bath, Portsmouth y Brighton.
La reunión informativa para las familias del grupo participante tendrá lugar el próximo jueves, 24 de abril, a las 17:00 horas, en al salón de actos del centro.
El acceso al salón de actos se realizará por Camino Viejo de Vélez (puerta de pista central). Con el objetivo de facilitar vuestra asistencia a la reunión, el Colegio ofrecerá servicio de ludoteca en la zona de pista central para aquellas familias que lo necesiten.
La pequeña ciudad de Winchester es de visita obligada para todos aquellos que quieren profundizar en la historia de Inglaterra, un lugar que, conservado a la perfección, narra en sus calles la historia de cómo uno de los países más importantes del mundo se formó a partir de varios reinos.
Desde el siglo VI, Winchester fue la sede del Reino de Wessex, un reino que abarcaba todo el suroeste de la actual Inglaterra. Cuando Wessex conquistó a los otros seis reinos que formaron inicialmente Inglaterra en el año 827, Winchester pasó a ser la capital de Inglaterra, y lo sería hasta que Londres tomase el relevo un par de siglos después.
Así, no es difícil imaginar la magia que puedes llegar a sentir al visitar Winchester; de la misma forma que no cuesta demasiado adivinar cómo era la ciudad hace mil años, pues realmente da la sensación de que no ha cambiado en absoluto. La esencia de la ciudad se mantiene intacta.
Winchester te hará pensar inevitablemente en el fantástico reino en que se inspiró -según dicen en esta ciudad- el Camelot del Rey Arturo que, mediante una estatua al lado del ayuntamiento de la ciudad, la protege.
Si la historia de Camelot siempre te ha fascinado, encontrarás además en la Gran Sala de Winchester la Mesa Redonda, donde los caballeros de Arturo se reunían según la leyenda. Pocas veces un cuento ha sido tan real.
Winchester, a su vez, es una ciudad de pequeños rincones; una ciudad que hay que recorrer a pie, despacio, y con los ojos bien abiertos; su gigantesca catedral es el punto más famoso con diferencia de la ciudad.
